El procurador estará al servicio de la revolución

Durante los gobiernos de la IV República los procuradores “se arrodillaban y subordinaban”, recordó Escarrá, quien detalló que estos funcionarios “hicieron un reconocimiento ilegítimo de un refinanciamiento de la deuda, cedieron jurisdicciones y atendían a los intereses de imperio y las trasnacionales”.