Desde las 9 de la noche y hasta las 6 de la mañana hubo toque se queda en varias localidades de los departamentos colombianos de Cundinamarca y Tolima, donde previamente se produjeron saqueos de supermercados.
En otros departamentos, como Quindío, fue necesario militarizar algunas ciudades, en previsión de que se reprodujeran los actos vandálicos.
"Lo que pasa es que vino una gran cantidad de personas de los sectores más pobres de la ciudad e intentaron hacer el ingreso irregular a los Supermercados Cundinamarca (Suoercundi). Tuvimos que militarizar la ciudad", dijo la secretaria de gobierno de Calarcá, Gladys Hernández.
Durante los saqueos la gente derribó las puertas y se llevaron electrodomésticos, víveres, alimentos, implementos de aseo, al igual que otros objetos de valor. La situación más grave se registró en el municipio de Saldaña, en donde el gentío se llevó todo lo que encontró en el local. En las redes sociales circulan fotos en las que se ven mercancías esparcidas por el suelo, así como estantes vacíos, reseñó Noticias Caracol.
Los saqueos han ocurrido en departamentos ubicados en la zona central de Colombia, lejos de la frontera con Venezuela. Tal vez por eso hasta ahora no se ha intentado atribuir la responsabilidad a los migrantes venezolanos, quienes, según el presidente Juan Manuel Santos, “son el problema más grave que sufre Colombia actualmente”.
La gran prensa colombiana, férreamente controlada por la oligarquía dominante, ha encontrado sin embargo la manera de dirigir las miradas incriminatorias hacia la izquierda. Todos afirman al unísono que los locales saqueados pertenecían a testaferros de las FARC que están siendo procesados por la Fiscalía colombiana.
En la noche de este miércoles, en la localidad de Ciudad Bolívar, al sur de la capital, cientos de personas se dedicaron a ingresar a todo tipo de establecimientos comerciales, informó El Espectador.
De acuerdo con ese diario colombiano, las concentraciones habrían sido convocadas a través de redes sociales y comenzaron pasadas las 7:00 pm en el barrio San Francisco. La muchedumbre se agolpó en inmediaciones de locales y, tras romper vidrios y puertas, asaltaron establecimientos como panaderías, carnicerías, zapaterías, librerías, bancos, tiendas de electrodomésticos y comercios de todo tipo.
“Llegó una banda de vándalos y cogieron a piedra todo para meterse. Como no pudieron meterse a los supermercados grandes, ahora están mirando cómo se meten a locales pequeños”, dijo a Blu Radio uno de los comerciantes afectados, algunos de los cuales se armaron para evitar los sucesos en sus negocios.
Se informó que han sido detenidas varias personas por intentos de saqueo contra supermercados en Bogotá y heridos varios policías desplegados para reprimirlos.
“Tenemos 14 capturados y 6 policías heridos. Damos un parte de tranquilidad, pero es importante decir que hay personas de otros sectores que llegaron aquí a liderar los saqueos”, dijo a periodistas el comandante operativo de la Policía de Bogotá, coronel Jorge Urquijo.
LOS DISTURBIOS
En videos difundidos por los medios locales se observa a decenas de ciudadanos enfrentando a los policías en la calle y protegiéndose de los gases lacrimógenos con los que las autoridades pretendieron controlar el saqueo.
Sin embargo, los locales fueron destruidos, según constató la policía, que también reportó caos, vandalismo y disparos.
Los medios colombianos han calificado esta explosión social como actos “vergonzosos”.
En otros departamentos, como Quindío, fue necesario militarizar algunas ciudades, en previsión de que se reprodujeran los actos vandálicos.
"Lo que pasa es que vino una gran cantidad de personas de los sectores más pobres de la ciudad e intentaron hacer el ingreso irregular a los Supermercados Cundinamarca (Suoercundi). Tuvimos que militarizar la ciudad", dijo la secretaria de gobierno de Calarcá, Gladys Hernández.
Durante los saqueos la gente derribó las puertas y se llevaron electrodomésticos, víveres, alimentos, implementos de aseo, al igual que otros objetos de valor. La situación más grave se registró en el municipio de Saldaña, en donde el gentío se llevó todo lo que encontró en el local. En las redes sociales circulan fotos en las que se ven mercancías esparcidas por el suelo, así como estantes vacíos, reseñó Noticias Caracol.
Los saqueos han ocurrido en departamentos ubicados en la zona central de Colombia, lejos de la frontera con Venezuela. Tal vez por eso hasta ahora no se ha intentado atribuir la responsabilidad a los migrantes venezolanos, quienes, según el presidente Juan Manuel Santos, “son el problema más grave que sufre Colombia actualmente”.
La gran prensa colombiana, férreamente controlada por la oligarquía dominante, ha encontrado sin embargo la manera de dirigir las miradas incriminatorias hacia la izquierda. Todos afirman al unísono que los locales saqueados pertenecían a testaferros de las FARC que están siendo procesados por la Fiscalía colombiana.
En la noche de este miércoles, en la localidad de Ciudad Bolívar, al sur de la capital, cientos de personas se dedicaron a ingresar a todo tipo de establecimientos comerciales, informó El Espectador.
De acuerdo con ese diario colombiano, las concentraciones habrían sido convocadas a través de redes sociales y comenzaron pasadas las 7:00 pm en el barrio San Francisco. La muchedumbre se agolpó en inmediaciones de locales y, tras romper vidrios y puertas, asaltaron establecimientos como panaderías, carnicerías, zapaterías, librerías, bancos, tiendas de electrodomésticos y comercios de todo tipo.
“Llegó una banda de vándalos y cogieron a piedra todo para meterse. Como no pudieron meterse a los supermercados grandes, ahora están mirando cómo se meten a locales pequeños”, dijo a Blu Radio uno de los comerciantes afectados, algunos de los cuales se armaron para evitar los sucesos en sus negocios.
Se informó que han sido detenidas varias personas por intentos de saqueo contra supermercados en Bogotá y heridos varios policías desplegados para reprimirlos.
“Tenemos 14 capturados y 6 policías heridos. Damos un parte de tranquilidad, pero es importante decir que hay personas de otros sectores que llegaron aquí a liderar los saqueos”, dijo a periodistas el comandante operativo de la Policía de Bogotá, coronel Jorge Urquijo.
LOS DISTURBIOS
En videos difundidos por los medios locales se observa a decenas de ciudadanos enfrentando a los policías en la calle y protegiéndose de los gases lacrimógenos con los que las autoridades pretendieron controlar el saqueo.
Sin embargo, los locales fueron destruidos, según constató la policía, que también reportó caos, vandalismo y disparos.
Los medios colombianos han calificado esta explosión social como actos “vergonzosos”.
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