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Estamos en presencia de la última revolución del siglo XX y la primera del siglo XXI, así lo aseveró el Comandante Chávez al final de los años 90. Esta revolución todos los días se ve amenazada por el imperialismo norteamericano, los enemigos están en la patria y fuera de ella, en la burguesía apátrida y dentro del gobierno, todos los días se siguen descubriendo debido a que la marcha histórica de la revolución es indetenible, la fuerza centrífuga popular la estamos aplicando en todos los espacios para salir de todo aquello que conspire contra el socialismo.
Lo productivo y lo territorial hay que masificarlo como elementos correctivos de la dinámica capitalista y promotores de lo socialista, es decir en la medida que producimos alimentos y bienes para la necesidad del pueblo, es obligatoria la organización desde abajo para la justa distribución en los barrios y comunidades casa por casa. Esta estrategia es parte del espíritu de la comuna, de la generación y reproducción inmediata de las nuevas relaciones sociales que tumben de la raíz el ambiente egoísta que nos genera el capitalismo y que hoy alimenta los vicios que sustentan la guerra económica.
Otro elemento que conspira contra él pueblo es la lentitud del sistema de gobierno. El burocratismo y la corrupción en las instituciones del estado entorpecen a cada momento la relación del líder Nicolás Maduro con su pueblo, es por esta razón que la dirección de procesos como la distribución de alimentos debe tenerla el pueblo, no basta con la red mercal y pdval, el pueblo pobre debe adueñarse de los procesos vitales de la economía desde los sencillos hasta los más complejos.
En la relación campo-ciudad hay que crear lo nuevo, la producción de nuestros campesinos unida poderosamente a la fuerza comunal industrial de las ciudades en una relación positiva y victoriosa, por ejemplo la Comuna Socialista EL MAIZAL con el Corredor Político Argimiro Gabaldón y toda su producción agrícola con la Empresa Agroindustrial Proletarios Uníos (Antigua cervecera Brahma) en la zona industrial 2 de Barquisimeto (Corredor político comunal Obelisco Chirgua). Todo esto nos libera de lo que nos determina, por ejemplo en estos momentos la lógica del capital respondiendo con el látigo del mercado y todo esto dominado por la intermediación especulativa que mantienen mafias que son enemigas de la economía productiva nacional.
Del mismo modo lo político es fundamental, porque debemos mantener la senda victoriosa de la revolución. Cada calle, cuadra, manzana, comunidad, pueblo y ciudad de Venezuela debe estar dominada, controlada, orientada y dirigida por el pueblo organizado a través del gobierno comunal, LAS COMUNAS, es por eso que ningún venezolano que desee, anhele, necesite y quiera que las cosas funcionen debe dejar de participar para lograr transformar su realidad. Dentro de la participación hay dos elementos fundamentales para lograr tomar decisiones correctas, es el DEBATE y LA UNIDAD. Cada comunidad debe entrar en una dinámica diaria de movilización popular, debate, organización, formación y producción como elementos de lucha para construir el poder necesario hecho gobierno, que nos permita hacer todo lo necesario para vivir viviendo. El capitalismo siempre nos pone a competir en todos los aspectos, nosotros debemos promover la complementariedad, la ayuda mutua, la solidaridad y el trabajo en equipo para alcanzar todo lo que nos propongamos colectivamente.
La Venezuela comunal está naciendo y no es otra que la Venezuela Potencia de la que nos hablaba el comandante Chávez y que hoy continúa de la mano del Presidente Nicolás Maduro, hoy nos estamos organizando para lograr un 2015 de aceleración comunal, de reproducción del espíritu de la comuna a nivel nacional, de dirección política y económica popular, de pueblo presidente, de transformación del modelo actual desde abajo como nos lo indica la constitución y el Plan de la Patria 2013-2019.
Hoy juramos que nosotros VENCEREMOS, que ganaremos la guerra, que no podrán con un pueblo produciendo, que el mundo tendrá que reconocer la fuerza de los hijos de Bolívar y Chávez organizados, que el Presidente Nicolás Maduro no está solo, que él es uno más de nosotros y juntos estamos logrando el legado histórico de Chávez.
Comuna o nada. Socialismo o nada
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