El concejal de Primero Justicia en el municipio Zamora (Guatire y Araira), rechazó que se continúe la campaña de descrédito contra distintos dirigentes locales por las acciones tomadas en el Concejo Municipal de esta localidad mirandina. Considera que seguir dando declaraciones “sin escuchar la otra versión es incorrecto y no contribuye a resolver la situación”.
Herrera, quien acompaña las decisiones de Ninoska Urbáez y Silfredo Rubino, aseguró que “nuestras actuaciones han sido para proteger a 82 personas que fueron injustamente sacadas del Concejo Municipal. A estas personas ni siquiera se les abrió el procedimiento administrativo que correspondía, simplemente, de un plumazo se eliminaron 82 puestos de trabajo y peor aún, estos trabajadores han denunciado que hasta sus expedientes desaparecieron de la Cámara. Pero lo más grave es que argumentaron insuficiencia presupuestaria para sacarlos y en febrero contrataron a 32 personas más. ¿Cómo se explica esto?”.
Sobre los señalamientos de un “pacto” entre Primero Justicia y el chavismo en Zamora, Herrera señaló “no hay pacto, ni acuerdo. Aquí tenemos un punto de coincidencia en este momento, que es la defensa de los trabajadores, pero nosotros no hemos negociado nada, todas las decisiones se han tomado en sesiones públicas. A diferencia de lo ocurrido con otros, que se escondieron y convocaron a un suplente chavista para botar a los trabajadores, como ocurrió el 23 de diciembre del año pasado”.
Herrera citó el caso de los concejales de Primero Justicia en Las Mercedes del Llano, donde ni siquiera han podido ejercer sus concejales. “En ese municipio llamero hubo un pacto entre Voluntad Popular, AD y el PSUV para evitar que los concejales de Primero Justicia, Maryira Jaramillo y Luciano Molino, asumieran sus cargos, ni siquiera les permiten el acceso al Concejo Municipal. Eso no lo denunció nadie, por eso no hay presiones en la MUD, simplemente hacen un pacto para sacar a dos concejales nuestros y nadie dice nada. Allí no hay pacto de la toronja, ni de la mandarina, ni del rábano”
Sin embargo –dijo Herrera- aquí en Guatire nos piden que echemos para atrás una decisiones para favorecer a 82 padres de familia simplemente porque unos concejales de AD y Voluntad Popular tienen pretensiones personales en la Cámara.
Por último, Herrera llamó a los guatireños a “no caer en la trampa del chantaje de la Unidad. Si algo hemos aprendido de Henrique Capriles es que no puede haber distinción política en la defensa de los derechos de la gente, del pueblo. En ese sentido hemos actuado y seguiremos actuando. Nosotros no nos hemos repartido cargos como señalan algunos, ese no es nuestro interés, lo único que nos importa es que el Concejo Municipal funcione, sanear la institución y ponerla al servicio del pueblo y poder hacer una gestión transparente”.
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