Los movimientos sociales de Brasil organizaron una jornada de apoyo a
la Revolución Bolivariana y en defensa del legado integracionista de
Latinoamérica.
La acción solidaria llevada a cabo en Brasil desde las ciudades: Río de Janeiro, Sao Paulo, Boa Vista, Manaos, Belén Do Pará y Brasilia, capital Federal, son una respuesta a la arremetida de los sectores de la derecha venezolana y regional que pretenden acabar con los procesos progresistas en la región.
En las ciudades referidas, representantes de los diversos movimientos sociales y populares manifestaron apoyo al Gobierno Constitucional del presidente Nicolás Maduro Moros ante la embestida fascista, y sobre todo en el marco del 27° aniversario de la rebelión popular conocida en la historia contemporánea venezolana como el Caracazo del 27 de febrero de 1989, cuando el pueblo venezolano se reveló contra el paquete de medidas neoliberales del gobierno derechista del expresidente Carlos Andrés Pérez como fiel exponente del pacto de Punto Fijo que se caracterizó por el modelo excluyente que hoy pretende ser restaurado no solo en Venezuela sino en el contexto latinoamericano.
Para dejar expresa su solidaridad, integrantes de los movimientos sociales acudieron a la sede de la Embajada de Venezuela en Brasilia, donde hicieron entrega de un manifiesto de apoyo a la Revolución Bolivariana e instaron a continuar los planes sociales implementados por el Comandante Hugo Chávez y que se traducen en beneficio de las grandes mayorías de la nación.
El comunicado de apoyo fue recibido por el embajador de Venezuela en Brasil, Alberto Castellar Padilla, quien -en nombre del presidente Maduro- agradeció el consecuente apoyo de los movimientos sociales brasileros.
Castellar señaló que Venezuela sigue comprometida con el legado integracionista de Simón Bolívar y materializado por el Comandante Chávez. "Venezuela seguirá impulsando los procesos de integración como la Celac, la Unasur, el Alba, Mercosur, Petrocaribe, y todos aquellos espacios unitarios que signifiquen la unión para América Latina y el Caribe. No habrá lugar para dejarnos dividir por los agentes del neoliberalismo que desean acabar con la integración regional, y así volver a las viejas prácticas de la oscura noche neoliberal que nos sumió en una profunda crisis de desigualdad social a lo largo de todo el siglo 20".
"Seguiremos trabajando en lo político, económico, comercial y cultural en el marco de una agenda positiva de los gobiernos de presidente Maduro y de la presidenta Dilma Rouseff sin que nada nos perturbe. Nuestra agenda bilateral es la agenda de la integración como quedó expresado en la reciente visita al Brasil de nuestra canciller Delcy Rodríguez", acentuó el embajador Castellar.
En medio de la actividad, el diputado Pablo Pimenta, presidente de la Comisión de Derechos Humanos, de la Cámara de Diputados del Congreso brasileño señaló: "Somos hijos de una misma causa y tenemos un sueño en común: de construir un mundo mejor, una sociedad donde las personas sean valoradas independiente de su clase social y donde cada uno de nosotros pueda ser constructor de un proyecto ciudadano. Embajador, reciba nuestro abrazo, nuestra solidaridad y nuestro compromiso de compañerismo y de lucha".
En este mismo contexto, el también diputado brasilero João Daniel exhortó a la unión de los pueblos. "Tenemos el deber de luchar por ese gran sueño, que es el sueño de la Patria Grande, de la patria libre, luchar para que nuestros pueblos construyan su destino de ser libres y soberanos. Este sueño y esa gran lucha tendrá como destino la victoria"
Las voces de apoyo y el mensaje solidario quedaron expresos desde Río de Janeiro, Sao Paulo, Boa Vista, Manaos, Belén Do Pará, donde los dirigentes de las organizaciones populares también rechazan todo intento de generar divisiones entre los pueblos de Venezuela y Brasil y que buscan favorecer intereses extraregionales.
