Como es tradicional cada agosto, comenzó en Ciudad Bolívar, estado Bolívar, la tradicional Feria de la Sapoara, evento que señala el inicio de la pesca de esta especie autóctona del río Orinoco, famosa por la tradición de que quien se coma su cabeza se queda a vivir en Guayana para siempre.
A pesar de su fama a nivel regional y nacional, esta feria había caído en un declive por la desorganización y falta de atención que le dieron anteriores autoridades municipales al evento.
Sin embargo, en esta ocasión y gracias a la unión de esfuerzos entre la Alcaldía de Ciudad Bolívar, artesanos, comerciantes informales y comunidades organizadas, la feria ha renacido con nuevos bríos, mostrando así una nueva cara que atrae a más y más turistas nacionales y extranjeros.
Gracias a esto, quienes visitan esta capital histórica para disfrutar de la feria encuentran una ciudad mucho más limpia, con nuevos atractivos y un renovado espíritu de progreso y amor por las tradiciones.
“Yo vine a esta feria hace 4 años y de verdad que ahora se nota la limpieza de la ciudad, mucho más bonita, mejores calles y una mejor organización de los puestos de venta y las actividades culturales”, señaló Amelia González, del estado Monagas y quien junto a su esposo e hijos veía como un pescador con su red atrapaba las sapoaras desde una plataforma colgante al pie del Paseo Orinoco.
Los trabajadores de la economía informal han colaborado en esta organización, pues se sumaron al alcalde Sergio Hernández para despejar las aceras del Paseo Orinoco y otras calles aledañas, mientras que los comerciantes limpiaron y pintaron sus fachadas para esta ocasión.
“Creemos en la organización con las autoridades. Todos queremos mantener a nuestras familias pero también queremos mejor calidad de vida, así que estamos organizados para trabajar en zonas donde no afectemos el movimiento turístico y para mantener limpias las áreas que se nos asignaron”, manifestó el comerciante informal Manuel Caballero.
La Alcaldía de Ciudad Bolívar mantiene una campaña informativa y orientadora a turistas y locales para motivarlos a no tirar desperdicios al río Orinoco y mantener limpias las aceras y calles del Paseo Orinoco y de toda la ciudad.
Esta campaña también está dirigida a niños y niñas, quienes a su vez actúan como divulgadores de esta enseñanza entre sus padres y vecinos.
“Queremos crear una mejor conciencia y reforzar el amor a Ciudad Bolívar, que debe comenzar en nuestro mejor comportamiento como ciudadanos”, expresó el niño Roberto Pérez, participante de esta campaña.
Por su parte, el alcalde Sergio Hernández aseveró que esta “será la mejor feria” que ha visto Ciudad Bolívar en los últimos 40 años y apuntó que se ha logrado revertir el desorden y abandono que tuvo hacia esta tradición la anterior gestión municipal.
Señaló que 500 efectivos policiales están activos para proteger a los visitantes de la feria, a lo largo y ancho del cuadrilátero bajo del Casco Histórico de Ciudad Bolívar y el Paseo Orinoco.
Además se implementaron controles contra la ingesta de bebidas alcohólicas en la vía pública y su venta ilegal, así como se han colocado papeleras y se renovó el mobiliario urbano para que niños y adultos puedan regresar a los espacios desde el Puerto Blohm, el Mirador Angostura y la Capitanía de Puerto para disfrutar de la belleza del río Orinoco.
“Este año, a pesar de que las lluvias llegaron con retraso, hemos tenido la suerte de que las sapoaras ya comenzaron a salir de los criaderos y hoy tenemos muchos pescadores faenando este pescado en nuestro río. La presencia de la sapoara marca el renacer turístico de nuestra capital”, aseveró el pescador artesanal Flavio Martínez.
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