La declaratoria de la Asamblea Nacional (AN) de una crisis humanitaria de salud en el país por la falta de medicamentos e insumos médicos es impulsada por corporaciones farmacéuticas, quienes agrupan a empresas transnacionales y desarrollan una campaña de intervención de organizaciones internacionales.
En declaraciones difundidas esta semana, el presidente de la Federación Farmacéutica Venezolana (Fefarven), Freddy Ceballos, dijo que el país se encuentra en "crisis humanitaria" porque "están muriendo pacientes por la falta de medicamentos".
En un comunicado de prensa señaló: "¿Qué va a pasar con esos pacientes? Que se van a tener que activar los mecanismos transnacionales como la Cruz Roja, la Organización de Naciones Unidas, la Organización Panamericana de la Salud, entre otros porque no podemos dejar sin medicinas a la población".
Fefarven publicó una lista, con fecha del 6 de enero, de 153 medicamentos que faltan en las farmacias y agrupan analgésicos, antibióticos, anticonceptivos, hipertensivos, antidepresivos, suplementos vitamínicos, antidiabéticos y anticonvulsivantes.
La lista no enumeraba los genéricos sino las marcas de los remedios distribuidos por grandes empresas, en su mayoría europeas y estadounidenses, agrupadas en la Cámara de la Industria Farmacéutica, asociada a la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), como Bayer, Pfizer, Merck, Abbot, Novartis y Roche.
Ceballos dijo que tienen una deuda que sobrepasa los 4 millardos de dólares, además estas empresas argumentan que no han recibido dólares del Estado, sin embargo datos del Cencoex demuestran lo contrario.
Por ejemplo Merck, la empresa que comercializa 14 tipos de anticonceptivos en el país, en el año 2014 recibió 105 millones 741 mil 558 dólares para la importación de medicina, de los cuales 61 millones eran para la adquisición de anticonceptivos que no hay en las farmacias. Entre tanto, a Laboratorios Bayer se le otorgaron 126 millones 138 mil 977 dólares para la importación de medicinas.
El exministro de Salud, Henry Ventura, detalló que "en julio 2014 a 387 empresas se le entregaron más de 2 mil 55 millones de dólares, o sea que al final de año se le entregaron a todas estas empresas $ 3 mil 700 millones a 6,30. Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) desde 2008 a 2013 hay un incremento de 1.345%", refieren medios digitales.
Señaló que en 2012 se entregó a las industrias farmaceutas $ 3.410 millones y solamente ingresaron al país 55.7 millones de kilos. En 2003 le entregamos $ 434 millones y la cantidad de kilos era casi de 221 millones.
La política de las empresas importadoras de medicamentos, que mientras más dólares reciben menos medicamentos y materiales traen al país, está inmersa en las estrategias de la guerra económica que impulsan sectores de la derecha en Venezuela y que también influye en la distribución de alimentos, artículos de primera necesidad y repuestos para vehículos.
GUERRA INTERNACIONAL
Los diputados de la oposición se han hecho eco en la Asamblea Nacional de la derecha internacional, encabezada por el Departamento de Estados Unidos, que en reiteradas oportunidades han declarado que existe una crisis humanitaria en Venezuela.
En mayo de 2014 el diputado boliviano Adrián Oliva, vocero de la Alianza Parlamentaria Democrática de América (APDA), advertía sobre la "crisis humanitaria" .
Durante los hechos de violencia de la oposición, Oliva declaró que "estamos siguiendo de cerca la situación venezolana y estamos tomando nota detallada de cada nueva violación a los derechos humanos".
En junio, el exministro de Rafael Caldera, Fernando Egaña, indicó que en el país existía una escasez de alimentos y medicamentos por una crisis humanitaria.
Los gremios de médicos y dueños de clínicas empezaron a declarar sobre el tema en agosto, mientras que en septiembre el senador republicano por Florida, Marco Rubio, afirmaba que la crisis humanitaria en Venezuela estaba empeorando cada día.
Los expresidentes del círculo de amigos de los dirigentes opositores no tardaron en dar sus pronunciamientos. El exmandatario colombiano, Andrés Pastrana, luego de su viaje a Venezuela, señaló en una entrevista en el diario de Bogotá El Tiempo que "veo venir una crisis humanitaria por el desabastecimiento".
El pasado 28 de octubre de 2015 el exjefe militar del comando sur de Estados Unidos (EEUU), John Kelly, durante una entrevista otorgada a CNN, mostró las intenciones del imperio gringo de intervenir el territorio venezolano.
"Si hay alguna crisis humanitaria importante, es decir, un colapso de la economía, al punto que necesiten desesperadamente alimentos, agua y cosas como esas, entonces podríamos reaccionar a eso, solo si nos lo piden la ONU, la OEA o la FAO…", dijo Kelly, cuya fórmula fue replicada por los dirigentes de la derecha venezolana para desarrollar su campaña a las elecciones parlamentarias y que ahora llevan al seno de la Asamblea Nacional.
AN JUSTIFICA INTERVENCIÓN
Según el derecho internacional una crisis humanitaria se declara cuando existe una situación donde las necesidades básicas de salud, seguridad o alimentación no son satisfechas y se agudizan por la incapacidad del Gobierno.
Promover la idea de que en Venezuela existe una crisis humanitaria de magnitudes como las de Irak, Siria, Sudán del Sur y República Centroafricana, donde hay guerras y hambrunas graves, es una de las tácticas que utiliza el Parlamento adeco-burgués para justificar la intervención de organismos internacionales en nuestro país.
El diputado del Bloque de la Patria, Yul Jabour, afirmó que en la propuesta, presentada por el parlamentario de la oposición José Manuel Olivares y aprobada en la sesión de la Asamblea Nacional el pasado martes, se presentaron números y elementos que no son verdades.
Afirmó que ese es un elemento de carácter político "lo que ha hecho la oposición en todas estas sesiones es tratar de generar un ámbito que permita la intervención de organismos internacionales en Venezuela", dijo ayer al salir de la reunión de la Comisión de Política Exterior de la AN.
En tal sentido, el parlamentario del Gran Polo Patriótico indicó que "cuando se plantea un documento que tiene carácter inconstitucional (…) lo que se busca es establecer una matriz de opinión de que Venezuela es un Estado fallido que tiene una crisis humanitaria y está en una situación que requiere intervenciones de organismos".
Agregó que la declaración de la Asamblea responde a políticas de las grandes potencias que buscan con la llegada de la derecha al Parlamento venezolano abrirse cauce a nivel institucional y legitimar la agresión contra Venezuela desde un Poder Público para justificar cualquier agresión.
Jabour recalcó que los diputados de la bancada revolucionaria rechazan con contundencia y de manera firme esos señalamientos y las políticas que la derecha viene desarrollando desde el seno del Parlamento.
Por su parte, el diputado revolucionario Elías Jaua explicó que una crisis humanitaria puede llevar a la intervención del Consejo de Seguridad de las Organizaciones de Naciones Unidas en un país soberano.
"Seguimos viendo una oposición absolutamente irresponsable que promueve la injerencia, que promueve el desconocimiento del resto de los poderes".
El diputado Saúl Ortega afirmó en una entrevista a Venevisión que "eso es una exageración de la oposición hablar de una crisis humanitaria, un tremendismo. Esta es una oposición que así como no tiene compromiso con el país buscan alarmar a la gente, crear caos, conmoción y lo que están buscando es generar una crisis para poder generar violencia en las calles como ya lo hicieron".
En el Decreto de Emergencia Económica, tal y como lo recordó el diputado Víctor Clark en la sesión del martes, estaba previsto el impulso a la industria farmacéutica, sin embargo, no contó con el respaldo de la mayoría de la derecha, que negó el instrumento legal propuesto por el presidente de la República, Nicolás Maduro.
