Resumen Latinoamericano/ 4 de enero 2016.- En medio de la crisis en seguridad que envuelve a la provincia de Buenos Aires por la fuga de los condenados por el triple crimen de General Rodríguez, un grupo de internos de la cárcel de Barker, a sólo 60 km de la ciudad de Tandil, se amotinaron, durante varias horas de la tarde de ayer, en reclamo de mejores condiciones carcelarias. Anoche el motín había finalizado sin heridos graves, pero puso en alerta nuevamente a la Policía Bonaerense.
Un grupo de entre 15 y 20 presos se amotinó en el pabellón 1 de la Unidad Penitenciaria 37 de Tandil, reclamando mejores condiciones de alojamiento y de alimentación.
Las primeras comunicaciones se hicieron a través de mensajes dirigidos al canal de noticias C5N, por lo que el hecho pronto comenzó a viralizarse en las redes sociales. Los detenidos, todos ellos con el rostro tapado, denunciaron que “nos estamos cagando de hambre. Nos van a matar”.
Los amotinados reclamaron también por la situación de los que, según dijeron, se encontrarían en condiciones de recuperar la libertad por tener sus penas cumplidas y se demoran los trámites de excarcelación. En ese sentido, denunciaron que las excarcelaciones se demoran en aquellos casos en los cuales “no hay plata para los informes de buena conducta”. Además, a través de un video que difundió C5N denunciaron que “si nos trasladan al penal de Sierra Chica, nos van a matar a todos”.
La situación se volvió más compleja cuando el jefe de la Unidad Penitenciaria N° 37 intentó convencerlos de que depusieran su intento. Al no poder llegar a un acuerdo por vía pacífica el problema se trasladó a La Plata, donde las autoridades provinciales debieron marchar de inmediato para la zona en conflicto.
Los líderes de los amotinados iniciaron, tras varias horas de protesta, una negociación con las autoridades carcelarias a fin de levantar la protesta, que según fuentes locales finalizó anoche sin graves incidentes ni internos heridos de gravedad.
El motín se produce en medio de la emergencia carcelaria y penitenciaria dictada por el Gobierno de María Eugenia Vidal.
UNIDAD 37 DE BARKER, TANDIL
Por Por Analía Porticella/ APL /05 de Enero 2016.-
“Nos quieren matar por reclamar nuestros derechos”
Tras ser amenazados de muerte por reclamar sus derechos por autoridades penitenciarias, 80 presos se amotinaron ayer, a las 9 de la mañana, en el pabellón 1 de en la UP 37 de Barker, partido de Tandil. Los detenidos reclaman ser atendidos por los profesionales encargados de realizarles sus estudios psicológicos para cumplir con los exámenes que requiere la Ley y así acceder a algún tipo de libertad asistida, que les son negadas sistemáticamente. También afirman que “la comida es solo para diez personas, los pasajes que tenemos para que nuestras familias vengan a visitarnos los venden y lo que es peor nos quieren cobrar los informes psicológicos para el juzgado. Tampoco nos dejan salir a trabajar y cuando vamos al salón de usos múltiples, de visita terminamos peleando con otros presos que trabajan para la policía”.
Los privados intentaron dialogar durante la semana pasada con las autoridades del Servicio Penitenciario Bonaerense, quienes solo respondieron con violencia psicológica y desinterés. Amenazaron con reprimirlos, matarlos y trasladar a otras unidades a los sobrevivientes.
“El martes, el miércoles y ayer en la visita en presencia de nuestras familias entró la policía y tiró tiros. Y todo eso delante de nuestros hijos y familiares porque los que manejan el sum son presos que trabajan para la policía, entonces siempre termina todo mal. El jefe de pena, Ramírez, es el que les da a ellos la portación de los “fierros” (facas). “Nosotros queremos que sepan que nuestras vidas corren peligro, somos personas también y nos quieren matar por reclamar nuestros derechos”, afirmó un detenido a la APL.
A las 14 horas el Director de la Unidad, Villagra, se acercó al pabellón y mediante un texto que uno de los detenidos leyó en su presencia, se comprometió a solucionar el conflicto en el plazo de dos horas. Todavía estamos esperando.
fuente: Agencia Para la Libertad
